La quiero a morir

Durante el vigésimo aniversario de Germán y Manuela, Germán planea huir del país con su amante, Catalina. Manuela se pregunta donde puede estar su esposo y se entera de la desagradable noticia gracias al esposo de Catalina.

Manuela descubre que Germán las dejó en la calle, pues su casa está a nombre de alguien más. Sansón intenta dar marcha atrás a la propuesta de matrimonio que le hizo a Yuri y ella amenaza con hacerse daño.

Manuela le pide ayuda a su hermana Lucrecia, pero ella decide no ayudarla porque Germán le debe dinero. Sergio se entera que algunos deudores que tiene son peligrosos. El dueño de la casa de Manuela llega a tomar posesión.

Catalina no confía del todo en Germán y le reclama por llamar a su casa. Sansón le presta dinero a Stalin para arreglar el carro de Sergio. Jorge le confiesa a Pola que la ama, pero cuando llega su esposa al taller se va con ella.

Sansón le reclama a Stalin por ser abusivo y no pedir permiso. Lucrecia les miente a Cecilia y Viviana diciendo que intentó ayudar a su hermana y Manuela no quiso su ayuda. Camilo le dice a Andrea que no puede ayudarla.

Jorge intenta llevarse a Manuela y sus hijas a su casa, pero ella se niega a irse. Yuri le pide a Sansón hacer el amor por última vez, él acepta. Lucrecia saca de su casa a los trabajadores que llevó Jorge, entre ellos Katherine.